Por nuestra culpa

Por mi culpa,
mis lágrimas lloran al recorrer tu mejilla.
Por mi culpa,
no puedo respirar tu dulce perfume helado.
Por mi culpa,
he olvidado cómo vivir en paz y en armonía.
Por mi culpa.
Todo por mi culpa.

No quiero morir entre los brazos de la luna,
su hiel, fría y dañina, acecha entre las estrellas,
no quiero dormir y olvidar toda su amargura,
toda su melancolía, presa tras su careta.

Ya nada me importa.

Por su culpa,
la miseria odiosa me asesina en la penumbra,
me clava su estaca, siempre sangrienta y mezquina.
Por su culpa,
Un dolor punzante me persigue todos los días,
como si mi sombra me golpeara con su fusta.
Por su culpa,
ya no sé quién es quién. ¿Somos reyes sin corona?
¿Soy un simple siervo? ¿Somos capitanes sin barco?
Por su culpa.
Todo por su maldita culpa.